Es innegable el papel crucial que juega la madera en la acústica. ¿Es imposible imaginar guitarras, violas o cajones flamencos sin madera?
En nuestro afán por mejorar lo que ya es perfecto, hemos experimentado con diferentes tipos de materiales en la construcción de instrumentos y el resultado siempre es el mismo: fracaso (afortunadamente).
Cada contrabajo, cada piano o cada sala de conciertos tiene su propia resonancia y ésta varía en función de la forma, la madera utilizada, el tratamiento que ha recibido y una gran variedad de factores climatológicos.
Históricamente, las cualidades acústicas de la madera se han utilizado también en reproductores de audio, altavoces y radios. La reverberación única conseguida por este material lo convierte en un recurso habitual que enriquece el producto sonoro final.
El genial Dieter Rams ya recurría al nogal y el pino en sus altavoces para Braun, como en el modelo L2, de 1958. cumpliendo con el alegato de Rams: “menos pero mejor”.
Más de cuarenta años después, la marca Tivoli Audio, ganaba una gran popularidad por su calidad sonora y por crear elementos como este:
Se trata de un modelo en madera de nogal que ha resistido sin variaciones estéticas el paso del tiempo gracias a su acabado limpio y cuidado.
Por último, el estudio de diseño Nendo imaginó unas curiosas cajas de música con formas figurativas talladas en madera de ciprés japonés recogido bajo una gestión forestal sostenible. Se presenta en tres versiones: campana de mano, de pie y colgante. El modo tradicional de tocar las campanas se utiliza en este caso para encender el reproductor, estableciendo un paralelismo entre el objeto real y el objeto imaginado por Nendo.