La madera evoluciona para dar al espacio diferentes usos adaptándose a necesidades concretas. Esta es la filosofía a partir de la cual los diseñadores del estudio Dubbeldam Architecture + Design (Toronto) han revolucionado el concepto del espacio de trabajo con su Pop-Up Office que aúna los conceptos de mobilidad, adaptabilidad y flexibilidad.
Según los creadores de esta original oficina, “cuando lo único que necesitamos es una superficie para trabajar y un lugar para enchufarnos, el ambiente de trabajo ya no es estático”. Por ello, desde este estudio canadiense nos proponen un esqueleto creado a partir de tableros y listones de madera recuperados de palets, que se adapta al espacio según el uso que se le quiera dar en cada momento.
Para conseguir un acabado más agradable, las partes de la madera que entran en contacto con el cuerpo humano se han tratado y lijado, conservando las zonas más ocultas en su estado natural.
Los diferentes módulos se pueden combinar de muy diversas formas para conseguir espacios de trabajo tanto individual como colectivo, un salón o un área de descanso. Cada módulo se compone de planos separados correspondientes al suelo, la pared y el techo, a los que se pueden añadir los elementos de mobiliario necesarios. En la pared, unas ranuras existentes entre los tableros permiten insertar estantes, creando zonas ajustables para el almacenaje y la exposición de diferentes objetos y utensilios.
Ideada para un uso temporal, los módulos y piezas de la Pop-Up Office pueden ser transportados y reconfigurados de forma rápida y sencilla, permitiendo un montaje ágil para usos poco comunes como festivales al aire libre, situaciones de emergencia, o incluso como lugar de trabajo para emprendedores.
Por encima de todo, Pop –Up Office es una reflexión multidisciplinar sobre los nuevos modos de trabajo que sintetiza las bases de un diseño responsable con el medio ambiente, algo que valoramos desde L’Antic Colonial.
Imágenes: dubbeldam.ca