Económicos y fáciles de instalar, los suelos laminados son cada vez más difíciles de distinguir de los suelos de madera natural en cuanto a apariencia, sobre todo si nos decantamos por marcas y modelos de calidad.
Los suelos laminados presentan muchas ventajas, entre ellas.
- Gran resistencia al desgaste, los golpes y los arañazos.
- Alta durabilidad.
- Posibilidad de ser instalados en cualquier espacio de la casa.
- Limpieza y mantenimiento sencillo (este tipo de pavimentos tienen una capa protectora que evita que la suciedad penetre y, debido a su resistencia, requieren menos reparaciones o sustituciones).
Clasificación de los suelos laminados: AC, Uso y Ámbito
El suelo laminado está dentro de los llamados «sistemas flotantes».
Este tipo de suelos se fabrican siguiendo una estructura de láminas o capas que incluye un tablero de fibra de alta densidad (HDF) para aportar estabilidad y resistencia; una contraplaca para que el núcleo no se deforme; una capa decorativa conformada por una fotografía de alta resolución y una capa de resina (overlay) que sirve como protección final.
En el mercado existen diferentes suelos laminados según su grosor y sus propiedades mecánicas.
Todo ellos responden a la «Clasificación AC», un sistema internacional que se rige por la norma de calidad UNE-EN 13329:2007 de revestimiento de suelos laminados.
De manera literal, las siglas AC son una referencia al criterio de abrasión (Abrassion Class) del suelo.
De forma genérica, la clasificación AC establece una escala de resistencia y dureza que todos los fabricantes de suelos laminados están obligados a respetar cuando etiquetan sus productos.
El objetivo de esta homogeneización es mantener unos estándares y facilitar la comparación entre distintos modelos de suelos y tarimas.
Las pruebas para determinar la clasificación AC se ejecutan con una máquina que tiene una lija y que simula el desgaste en la capa superficial del suelo.
Según las pasadas que soporta, el suelo puede ser:
- AC1. Hasta 900 pasadas.
- AC2. Hasta 1.800 pasadas.
- AC3. Hasta 2.500 pasadas.
- AC4. Hasta 4.000 pasadas.
- AC5. Hasta 6.500 pasadas.
- AC6. Hasta 8.500 pasadas.
La calidad de los laminados también se establece según su uso (moderado o intenso) y ámbito (residencial exclusivo o residencial y comercial).
Esto es lo que se conoce como «clase de uso», que va en una escala desde 21 (para suelos laminados de ámbito doméstico y uso moderado) hasta 34 (para suelos laminados de ámbito y uso residencial intensivo o industrial moderado).
¿Qué es un suelo laminado AC5?
El suelo laminado AC5 o tarima AC5 es uno de los tipos de suelos más resistentes del mercado.
Respecto a su clase y uso, equivale a una clasificación 23/33. El hecho de tener una clasificación a la abrasión AC no es el único factor, sino que además debe cumplir con las características marcadas por la Normativa.
Es decir, que está recomendado para su uso intensivo, tanto en pisos y casas, como en hoteles o en locales comerciales.
De hecho, este tipo de suelos son perfectos para espacios que requieren una mayor resistencia al desgaste.
Características del suelo laminado AC5
Ahora que ya hemos explicado qué significa que una tarima flotante es AC5, detallaremos algunas de las características de este tipo de pavimento.
- Densidad. La tarima flotante AC5 suelen tener un tablero de alta densidad (a partir de 800 kg/m³).
- Diseños y colores. Los suelos laminados AC5 ofrecen una gran cantidad de diseños y colores, y se adaptan a todo tipo de estilos y ambientes.
- Acabados. Los suelos laminados AC5 presentan acabados brillantes o en mate, y diferentes texturas (aserradas, lisas, con relieve, más o menos porosas, etc.). La coordinación de texturas es perfecta para garantizar acabados de gran realismo.
- Tratamientos. Algunos diseños de tarima AC5 incorporan tratamientos en su capa superficial para mejorar sus prestaciones (tratamientos antideslizantes, tratamientos hidrófugos o tratamientos antibacterianos). Esta opción los convierte en la mejor alternativa para zonas húmedas como cocinas o baños, y para viviendas donde conviven niños pequeños, personas con alergias, personas con problemas de respiración y/o mascotas.
- Instalación. Los suelos laminados AC5, al igual que todas las tarimas flotantes, son fáciles de instalar gracias a su sistema en clic, muy preciso y que no se deteriora con el paso del tiempo.
¿Dónde puedo instalar un suelo laminado AC5?
Los laminados AC5 pueden instalarse en cualquier sitio, siendo aptos para:
- Viviendas.
- Locales comerciales.
- Zonas húmedas de la casa. En este caso solo cuando tengan también el tablero y el click correspondiente para poder tener esta catalogación.
- Oficinas.
- Espacios públicos.
- Edificios con alto tránsito de personas y público (hoteles, teatros, cines, etc.).
¿Cuánto cuesta un suelo laminado AC5?
El precio de los suelos laminados AC5 puede variar dependiendo de los siguientes factores:
- Densidad del tablero. A mayor densidad de tablero, mayor estabilidad, pero también un precio más elevado.
- Grosor del tablero. Cuanto más grueso sea el tablero, más caro será el suelo.
- Tamaño. Muchos de los suelos AC5 se comercializan en piezas de formato XXL, y su coste también es algo más elevado.
- Diseño. Los diseños con decoración, acabado y textura exclusiva tienen un precio superior.
- Tratamientos extra. Los tratamientos extra suponen un encarecimiento de la tarima flotante.
- Marca. Los precios de los suelos laminados AC5 son diferentes de un fabricante a otro. Normalmente, el precio va ligado a la calidad del producto y de las materias primas utilizadas para su fabricación.
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